domingo, 10 de noviembre de 2013

HAY QUE BUSCARSE UN AMANTE




Muchas personas tienen un amante y otras quisieran tenerlo. Y también están las que no lo tienen, o las que lo tenían y lo perdieron. Y son generalmente estas dos últimas las que están tristes o  sufren de insomnio, falta de voluntad, pesimismo, crisis de llanto o diversos dolores.
Sus vidas transcurren de manera monótona y sin expectativas, trabajan solo para subsistir y no saben en qué ocupar su tiempo libre. Van a consulta y el diagnóstico es Depresión.

Ante estos síntomas lo que en realidad necesitan es un Amante.

Amante es: lo que nos apasiona. Lo que ocupa nuestro pensamiento antes de dormir y también a veces quien no nos deja dormir. Nuestro amante es quien nos vuelve distraídos en nuestro entorno, lo que nos deja saber que nuestra vida tiene motivación y sentido.
A veces a nuestro amante lo encontramos en nuestra pareja, en otros casos en alguien que no es nuestra pareja, también puede estar en la investigación, la lectura, la música, la política, el trabajo, en la necesidad de trascender espiritualmente, en la amistad, en la buena mesa, en el estudio o en un hobby.
Es alguien o algo que nos pone de “novio con la vida” y nos aparta del triste desafío de tener miedo a vivir.

Sé un amante y búscate un amante “vive la vida”

3 comentarios:

  1. Un título sugerente con un buen contenido.

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  2. El primer amante debe ser uno mismo, la única de desarrollar la capacidad de amar al prójimo y al todo, es aprender a amarse a si mismo

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  3. Y la única manera de aprender a amarse así mismo es conocerse a si mismo, pues no se puede amar lo q no se conoce y x ende lo q no se entiende

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